VALORES INSTITUCIONALES

 

Espíritu de familia. Capacidad de encuentro dialógico con los demás donde nadie es extraño; ayuda mutua que hace crecer y construir el proyecto de vida desde el reconocimiento de las particularidades y diferencias.

Honestidad. Capacidad de actuar siempre de manera coherente y transparente ante las acciones cotidianas y según las normas éticas y morales.

Responsabilidad. Responder de forma asertiva frente a las obligaciones, las decisiones y consecuencias de los actos propios al jerarquizar y priorizar los deberes en favor de la optimización de los recursos y los buenos resultados.

Alegría. Actitud positiva ante la vida y sus situaciones como expresión de la paz interior que permite descubrir y reflejar el sentido de lo bello que hay en sí mismo, en los demás y en el entorno.

Trascendencia. Actitud que permite ir más allá de las acciones cotidianas de la vida, de manera crítica y responsable en búsqueda del sentido de la propia existencia.

Liderazgo. Disposición activa, crítica, propositiva y asertiva para manifestar, aportar e influir en los procesos institucionales y sociales.